jueves, 2 de mayo de 2013

Tócala otra vez Sam.


Fotografía de Marta Herreros

Cuando rememoramos vidas y tiempos pasados la emoción sale de lo más profundo de nuestras almas. La voz se entrecorta, tiembla y transmite la autenticidad que llevamos dentro. Y quién es capaz de captar ese cambio de tono, esa vibración de la garganta y emocionarse, puede decir que también está vivo, muy vivo.