lunes, 28 de octubre de 2013

A oscuras y en silencio.


José Manuel, en la oscuridad vemos todo más claro. Una luz interior nos ilumina para comprender aquello que nos está pasando. Y es también en silencio cuando escuchamos con nitidez la voz sincera de nuestra alma. Necesitamos pues de ese clima de intimidad, que nos aísle del ruido ensordecedor de ahí fuera y ciegue la visión de imágenes distorsionadas, para encontrar el camino, la luz y el sonido de nuestro nuevo destino.

sábado, 26 de octubre de 2013

YGHBN


Y grises horas bordeando noches. Noches de insomnio girando alrededor de un pensamiento atascado en su mente. Horas y horas esperando ver la luz filtrarse por las rendijas de un nuevo amanecer.  Era su castigo, su penitencia por la cobardía que tiempo atrás la arrojó a las tinieblas. No pudo, o no quiso dar un paso hacia adelante y ahora sufría las consecuencias.

Pero no todo estaba perdido, una llamada  de teléfono en la madrugada la puso en alerta y disparó los resortes que la sacarían de ese triste letargo. Era él quien la convocaba, dentro de un par de horas, a un café a la hora de siempre y en la cafetería cómplice que cada mañana, no hace tanto, los acogía  para mirarse a los ojos y celebrar la vida.

Receló en un primer momento pero no pudo abandonar la idea de volver a verle. Una ducha fría despejó por completo su mente y tensó los músculos de su cuerpo. Dispuesta a dejarse llevar esta vez por aquello que le dictará su corazón se vistió deprisa y se lanzó a la calle para estirar las piernas  y ver amanecer en el parque.

Puntual, como nunca lo había sido, entraba en la cafetería y, con el corazón a punto de escapársele,  miró a ambos lados buscándole. Y allí estaba él, en el taburete de siempre ojeando El País y saboreando un cortado hirviendo.

Se situó a su espalda sigilosamente y, con voz temblorosa, pronunció un “hola” repleto de emociones contenidas. Él giró la cabeza, se levantó del taburete, la miró fijamente a los ojos y cayeron juntos en un prolongado abrazo de siete segundos, era el tiempo establecido para transmitirse, sin palabras, todo lo que habitaba en sus almas.

Y allí quedaron, frente a frente, contándose sus vidas como si nada hubiera ocurrido desde aquella  última vez que compartieron un café para dos.

Desconocemos qué aconteció tras ese emotivo reencuentro. No hemos vuelto a tener noticias de ellos pero, llegado el caso, daremos cuenta de la evolución de esta apasionada historia en cualquier momento. Permaneced atentos.

viernes, 25 de octubre de 2013

Recordándote.


Sigo recordándote con cariño, pasa el tiempo pero permanece la huella de una gran amistad.


Un viernes cualquiera,
cualquier viernes,
una mañana de otoño,
otoño por la mañana,
un cielo gris,
gris como la materia,
un recuerdo en la memoria,
memoria de recuerdos,
una ausencia siento,
y siento tu ausencia.

jueves, 24 de octubre de 2013

¿Te dedicarás a ser poeta?


Sé que tú también eres poeta, que miras al mundo con ojos muy despiertos y ves lo que otros no pueden ver; que sientes en tu alma, de una manera especial, cualquier guiño del destino, trastornándote por dentro; que vives intensamente y sueñas otras realidades paralelas; y que cuando escribes con el corazón en la mano fluyen preciosos versos que yo intento ordenar.

¿Te dedicarás a ser poeta?

martes, 22 de octubre de 2013

Bajo un cielo gris.


Nos quedamos con la poesía de los cuerpos que yacen en plena naturaleza rodeados de la belleza que tanto admiramos y amamos. Ese sería el destino ideal de nuestros cuerpos para fundirnos con nuestra madre Tierra; nuestras almas continuarán viajando, sin duda, en inmaculadas nubes de algodón mecidas por un cálido y suave viento.

lunes, 21 de octubre de 2013

El árbol caído.


Y ahora, tumbado, desnudo y muerto, que no sin vida, nos muestra la belleza y el candor de su alma.

sábado, 19 de octubre de 2013

viernes, 18 de octubre de 2013

No tocar.


Secada la flor, permanece el recuerdo de su belleza en punzantes espinas amarillas, y el perfume de su esencia en el frío viento de otoño. 

martes, 15 de octubre de 2013

De camino.

Tren 5065
Coche 08
199 Km/h
07:14

Una joven estudiante, sentada junto a la puerta, teje con lana color violeta. Una película empezada, que viene de Alicante, en la pantalla. Caras de sueño, ojos cerrados, música que suena en los auriculares. Un destino común: Madrid, atravesando la llanura. Una bella mujer ocupa el asiento delantero, junto a la ventanilla. Contemplo su rostro reflejado en el cristal de la noche. Sé que bajará en Cuenca y creo que jamás volveré a verla.
Ya llego

viernes, 11 de octubre de 2013

Mia Couto.


"Un truco para ser feliz consiste en desdoblarse en muchas vidas y personajes, transformarse uno en su propia narrativa".

Mia Couto

miércoles, 9 de octubre de 2013

Naufragando.


Cuando navegamos en un mar de dudas e incertidumbres y una ola inesperada y traicionera desarbola nuestra embarcación, arrojándonos al naufragio, sentimos, pasado el aturdimiento, la necesidad de volver a empezar de nuevo, construir otro barco y regresar a la mar.

lunes, 7 de octubre de 2013

Al final.


Al final todo acaba rompiéndose, pero la ruptura nos permite visualizar con mayor nitidez el cuentakilómetros de nuestras vidas.

domingo, 6 de octubre de 2013

Abajo.


¡Esto se nos viene abajo!
¡De abajo no pasa!
¡Oh no!

Normal, no hay unos pilares sólidos.

jueves, 3 de octubre de 2013

Puedo quererte.


Puedo quererte en silencio,
callado y con la boca cerrada,
puedo quererte con la mirada,
que no habla pero tampoco calla,
puedo quererte en la distancia,
acortando el tiempo que nos separa,
puedo quererte toda la vida,
sin pronunciar una sola palabra,
mas ahora, en esta tarde de otoño,
quiero quererte como me pide el alma.

martes, 1 de octubre de 2013

La alambrada.


Una alambrada de acero de espino nos separa: tú dentro y yo fuera. Si fuera posible saltar esta infame muralla y estrechar nuestras manos, o abrazar nuestros cuerpos, en tiempo de paz, habría dado sus frutos el esfuerzo de llegar hasta aquí para encontrarte. Pero no hay paz si no cesa la guerra. Una guerra de apasionadas escaramuzas que nos mantiene alerta y en guardia para evitar que la ronda de la guardia nos sorprenda.