martes, 26 de abril de 2011

Amor platónico.


¿Por qué el trigo, entre todas las flores, escoge siempre a la amapola?
Porque está enamorado desde la primera vez que la conoció en el campo y renueva su amor cada primavera.

Perdóname.


Yo, seguramente,
no siempre poseo la razón,
pero sí el sentimiento
para quererte y pedirte perdón.
Perdón por lo que te digo
y por lo que callo,
por mis gestos
y por los abrazos que me guardo,
por el pasado de antes
y el presente de ahora,
por el que fui
y por el que no supe,
no pude o no quise ser.
Perdóname, otra vez,
y las que hagan falta,
pues aunque no siempre posees la razón
sí el sentimiento para quererme.