domingo, 23 de octubre de 2016

Tu ventana.


A tu ventana azul acudo cada mañana con intención de verte. Sé que estás ahí, tras la cortina, esperando mi llegada. Pero son tantos tus miedos y temores que pasan los días y las oportunidades se pierden. Algún día dejaré de ir porque habré encontrado otra ventana abierta. Ese día serás consciente de tu desdicha y sentirás mi pérdida para siempre.