martes, 21 de agosto de 2012

Al final de la tarde.

Y al final de la tarde, cansada, un poco triste y pensativa, regresas a los reinos de Neptuno para sumergirte en dulces sueños despiertos. Nadarás toda la noche, recordando aventuras fuera del agua al lado de quienes conocen y admiran tu esencia marina; y compartirás secretos profundos, con tus hermanas sirenas, bajo reflejos de Luna que iluminan el rumbo incierto de la noche, a la espera de un nuevo amanecer en la playa imaginada de tu vida.