Como agua de niebla, pura, natural y fresca, caes atrapada
entre las mallas que al aire despliego. Micro gotas de lágrimas de nubes que
trae el viento del mar que habitas. Sabor ligeramente salado y muy refrescante.
Espejo donde me miro y te veo con esa mirada tuya, tan limpia y serena. Dejo que
corras por mi cara y laves mis heridas de fuego. Dormida en la tierra llana, evaporas tu esencia marina de regreso al mar para iniciar un nuevo ciclo. Como
agua de niebla, pura, natural y fresca, te espero a primera hora de la mañana.