Papeles, notas, números, letras... una sucesión tras otra de
ellos. Un ordenador, programas, correos que entran y salen… un
sinfín de pantallas. Dos manos de dedos largos y alguna mancha causada por el sol
y el paso del tiempo.Y dos ojos verdes que lo miran todo y lo analizan tratando
de cuadrarlo para que cada cosa esté en su sitio al final de la jornada.
LR