“Tal vez mi destino sea eternamente ser contable, y la poesía o la literatura una mariposa que, parándoseme en la cabeza, me torne tanto más ridículo cuanto mayor sea su propia belleza”. Fernando Pessoa
A todas mis madres, las propias y las ajenas, las que fueron y las que serán, las que son y las que nunca dejaron de serlo. A todas ellas, madres.