Faro fue tu mirada,
navegando en un mar de recuerdos.
Allá a lo lejos sentí tu luz
pero también las sombras del amor
que me atrapaba.
Temí ir regresar a tu puerto
y naufragar de nuevo al
encontrarte.
Dejé de mirar a tu orilla,
te di la espalda y puse rumbo a
otro faro,
a otra vida.