martes, 11 de junio de 2013

Insomnio.


No tengo sueño pero no puedo dejar de soñar.

Sueño despierto, a plena luz del día, con los ojos bien abiertos y no veo lo que ven mis ojos, sino lo que siente mi alma.

Y cuando llega la noche, y la oscuridad nubla mi vista, veo la luz de tu mirada iluminando sueños de almohada perfumada.

Sueños que buscan tus sueños y comparten, en mágicos escenarios, aventuras de un hombre y una mujer de ensueño.

Sigo sin tener sueño y sigo soñando, contigo.