Interrumpimos la conexión para
dejarles sin luz, a oscuras, y que puedan comprobar por ustedes mismos que sin
luz también es posible ver, incluso ver más, mejor y más allá que a plena luz. Porque
la luz nos impide ver, en muchas ocasiones, lo que hay detrás de ella, aquello
que estando tan a la vista y siendo tan evidente no logramos ver. No ver para
creer sino ver para sentir, a ciegas, otra realidad en otra dimensión.
¡Apagamos!