sábado, 17 de diciembre de 2016

Por la noche.


Y por la noche una bóveda de cañón estrellada cubría nuestros pasos camino de la Navidad.

Una mañana de sábado cualquiera.


Quiso la lluvia lavar las calles y limpiar nuestras conciencias mientras paseábamos a la intemperie una mañana de sábado cualquiera.