sábado, 14 de abril de 2012

Costaleros.

Concentrados para el esfuerzo. Caras y músculos que reflejan la tensión del momento. Orden, devoción, entusiasmo. Preparados y dispuestos a cargar sobre sus hombros y espaldas el peso de la tradición, la representación de una bíblica historia de pasión. Paños en la cabeza, fajadas las cinturas, brazos al aire y sentimientos a flor de piel. Atentos a las órdenes y a las palabras de ánimo del cofrade mayor, levantan con alma y corazón el paso que cargan a ritmo de marcha fúnebre.