Llevas tantas cosas en la cabeza,
en el cuerpo y en el corazón, que yo solo debería ser un bálsamo, un ungüento
que aliviara tu pena y dolor. Despertar en ti una sonrisa y tejer un hilo de
esperanza del que tirar. Si no soy la solución a todos tus problemas, tampoco
quiero ser otro más. Quiero estar a tu lado para lo que necesites y
transmitirte amor, paz y felicidad.