domingo, 18 de diciembre de 2011

Tus palabras.


Tus mejores palabras no son las que pronuncias, sino aquellas que callas.
Palabras que intento leer mirándote a los ojos e interpretar como si de una partitura se tratara.
Palabras con corazón, con ritmo, con alma.
Palabras separadas por largos silencios e intensas y fugaces miradas.
Palabras que callan pero dicen todo de ti y de lo que sientes.
Palabras llenas de dudas y escasas respuestas.
Palabras soñadas libremente cualquier noche, cualquier día.
Palabras que charlan con las mías, sin darnos cuenta.
Tus mejores palabras son las que callas, pero me conformo con escuchar aquellas que hablas.