lunes, 15 de marzo de 2010

Gracias por tus abrazos.


Inesperado el primero
y por ello deseado,
en un triste día del alma
con la alegría que finge en el rostro
y la tristeza que corroe por dentro,
gracias por tu abrazo.

Inesperado el segundo
y por ello más deseado,
en el jardín de la vida
al final de la jornada
con el corazón en tu mano,
gracias por tu abrazo.

Gracias por tus abrazos
al filo del precipicio,
en la encrucijada del cambio,
que guían mi amor hacia tu viento.

Gracias por el primero, por deseado,
gracias por el segundo, porque me muero.




1 comentario:

Anónimo dijo...

Canto de andar:
Amanece despacito en las tierras del crepúsculo,
las nieblas desaparecen con los rayos de sol.
Mi amor, mi amor, vamos hacia el mar mayor,
mi querida, mi bien, vamos por las tierras del más allá.
Acaricia el silencio y escuchar el corazón
que muchos de tus sueños laten a su son.
Mi amor, mi amor, vamos hacia el mar mayor,
mi querida, mi bien, vamos por las tierras del más allá.
Es hora de caminar y de no olvidar,
el futuro que vendrá es lo que debes hacer.
Mi amor, mi amor, vamos hacia el mar mayor,
mi querida, mi bien, vamos por las tierras del más allá.
Y el sol va silencioso acostándose en el mar,
haciéndonos pequeños con tanta inmensidad.