Lo que ayer fue moderno hoy es
antiguo y clásico. Cada uno somos de una época y el contraste a todos nos
beneficia. Podemos convivir juntos y que nadie nos juzgue por nuestro aspecto
sin mirarnos antes por dentro. Porque en el fondo somos iguales, tan sólo unos
siglos nos diferencian.
No hay comentarios:
Publicar un comentario