martes, 17 de noviembre de 2009

Para mi naufraga.


Eras una barca a la deriva
En un rumbo equivocado,
Sufriste tormentas y marejadas
Y no encontrabas tu camino.

Quiero ser el faro que ilumine tu sonrisa,
Quiero ser el puerto donde encuentres la calma,
Quiero navegar contigo por los mares del alma
Y descubrir juntos una nueva esperanza.

28/10/2009">

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un barco parece ser un objeto cuyo fin es navegar; pero su fin no es navegar, sino llegar a un puerto. Nosotros nos encontramos navegando, sin la idea del puerto al que deberíaos acogernos.
Ricardo Soares.