sábado, 30 de mayo de 2015

Tsunami.


Cuando todo se viene abajo, después de un gran terremoto existencial, creemos que nada tiene sentido y que jamás podremos salir adelante y reconstruir nuestras vidas. No encontramos respuestas que den sentido a lo que ha pasado, pero ha ocurrido y ese tsunami inesperado arrasó todo lo que encontró a su paso. ¿Qué podemos hacer para seguir adelante? Agarrarnos a aquello que todavía flota a nuestro alrededor y confiar en que llegaremos a la orilla para, una vez repuestos, continuar nuestro periplo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Alrededor es muy lejos ... yo recurro siempre al Ave Fenix...esta mas cerca de mi.

Anónimo dijo...

El Ave Fenix pone un huevo que incuba durante tres días y después se convierte en fuego. De sus cenizas , y del huevo, resurge otro igual,con sus mismas características pero con otros ideales ,algo diferentes cada vez..
Siendo un Ave tan cambiante y quemándose continuamente, yo sí que recurriría a algo o alguien de alrededor. No están tan cerca pero tampoco corres el riesgo de quemarte

Anónimo dijo...

Acertado. Didáctico. ... Inteligente ... Irónico.