Juntamos letras para construir palabras que ordenadas en frases expresan una emoción, un sentimiento, alguna reflexión, muchas dudas y pocas certezas. Palabras que florecen en primavera y tiñen de románticos colores los valles. Aromáticas palabras que fructifican con el calor y aguantan verdes todo el verano, regresando en otoño a la tierra descompuestas en letras caducas, trasnochadas, para abonar otros relatos de invierno. Y esta afición, o adicción, que algunos llaman poesía, es para mí, tan sólo, un sugestivo oficio de artesanía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario