domingo, 29 de mayo de 2011

Alergia a ti.


Somos sensibles,
extremadamente sensibles,
esnifando granos de polen
de anteras de estambres
de coloridas flores.

Estornudamos, tosemos,
lloramos lágrimas picantes,
que la mejilla recorren,
mientras ni respiramos
temiendo el asma nos ahogue.

Porque somos sensibles,
terriblemente sensibles,
a los granos de polen
que respiramos confiados
de tus excitantes flores.

viernes, 27 de mayo de 2011

Nuestras condescendientes sirenas.


“En el acto la sirena sintió miedo y eso mismo le hizo comprender que ya no era inmortal. Pero los acontecimientos no la dejaron arrepentirse. Un hormigueo violento se precipitó de cintura abajo desnudándola de escamas. Un rayo subió desde el fondo de las aguas y dividió su cuerpo inferior en dos mitades. Miró hacia abajo: dos piernas habían sustituido a su cola y en medio un bosquecillo como de algas donde se centraba el hormigueo, irradiándose a todo su cuerpo y removiéndolo tumultuosamente”.
José Luis Sampedro.

Navegamos y naufragamos frecuentemente cuando las condiciones del mar: el oleaje, la niebla, la bruma, las tormentas y nuestras tempestades interiores desarbolan nuestro barco arrastrándonos contra los acantilados y contra nuestro desencanto.
Recomponemos la nave y nuestro ánimo, una vez más, y nos hacemos de nuevo a la mar en busca de ese faro inalcanzable, que hemos soñado en oscuras noches despiertas, con la esperanza de hallarlo definitivamente antes de hundirnos en el mar de nuestros deseos imposibles, para siempre.
Disfrutamos, mientras tanto, de la agradable e inmerecida compañía de nuestras amigas y condescendientes sirenas que tanto han evolucionado a lo largo de la historia, de la mitología y de la vida.
Nacieron en Grecia, como extrañas aves con cara y torso de mujer, para transformarse en jóvenes irresistiblemente atractivas con cola de pez, en aguas nórdicas.
No cambiaron sus musicales, prodigiosas y encantadoras voces que llevaron a la ruina a infinidad de marinos arrojándose al mar en su búsqueda. Algunos lograron evitar el desastre, como los tripulantes de la nave Argos, en el periplo buscando el vellocino de oro, gracias a que Orfeo con sus músicas pudo neutralizarlas. O Ulises, que se tapó con cera los oídos para no sucumbir a las hechizantes melodías, atándose al mástil de la embarcación para no lanzarse al mar y unirse a ellas.
Presentimos que las sirenas de nuestros mares comparten con nosotros un mundo paralelo, en otra dimensión, donde vivimos las inagotables fantasías que escapan de las tres dimensiones establecidas.
Ellas han mudado la cola de pez por bonitas piernas que se alargan en afilados tacones. Sus impresionantes miradas, que hipnotizan, el glamour y el cariño que ofrecen, junto con sus envolventes cantos y el resto de sus inagotables encantos, nos acompañan en nuestra travesía a ninguna parte. Son las verdaderas protagonistas de nuestras vidas, pues sin ilusión, sin amistad, sin amor y sin esperanza es imposible continuar buscando ese faro fantasma que ilumine, por fin, nuestro último sueño.

domingo, 22 de mayo de 2011

Recuerdos de Cubas.


Camino por ribera del Júcar,
aroma dulce de fresca higuera,
trinos de pajarillos criando
en romería de Cubas a Jorquera,
rumor de río que baja a la playa,
flores multicolores de polen
que inspiro con sol de primavera,
vegetación de la verde orilla
ofreciendo su húmeda sombra
refresca la piel de recuerdos
que florecen ahora en mi mente
y piensan solos, sin verte.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Información, transparencia y representación.


La democracia, o gobierno del pueblo, lleva implícito que los representantes elegidos para desempeñar su labor en cualquier ámbito de la sociedad: político, laboral e institucional sean fieles a sus electores cumpliendo con el deber moral de ejercer la representación otorgada con responsabilidad y fidelidad a los programas electorales, con transparencia en la gestión de la actividad desarrollada e informando continuamente a sus representados. De no ser así estarán faltando a su compromiso con los votantes y generando desconfianza.
Observamos continuamente incumplimientos en la clase política, sindical y social. Dirigentes políticos que comienzan aplicando con rigor su programa socialista, por ejemplo, y terminan en brazos del liberalismo económico dando un giro de 180º al barco que pilotan en aras de seguir gobernando. No son conscientes, o no les preocupa, de su inminente naufragio y del daño que ocasionan a su partido político y a la sociedad. Sería más coherente dejar el timón y dar paso, de nuevo, a la voz y al voto del pueblo.
Representantes sindicales que no informan de sus gestiones con la dirección de la empresa, ocultando la existencia de las mismas y los acuerdos adoptados, bien por interés propio o quizás, queremos pensar, para no herir la sensibilidad de sus ¿inmaduros? representados.
Llega un momento de gran descontento y desilusión que mueve al colectivo más valiente y menos “atado”: la juventud, apoyado por otros jóvenes con cuerpos más rodados y menos contaminados, a lanzarse a la calle para sacarle los colores a los gobernantes y al resto de ciudadanos que están instalados en “su estado de bienestar”.
Debemos avergonzarnos de esta democracia decadente que sólo busca el interés particular de gobernantes, representantes sociales y buitres económicos que andan al acecho.
Es tiempo de cambios, de renovación moral, social y política. ¿Estamos dispuestos? Adelante.

martes, 17 de mayo de 2011

Materia oscura.


Venimos de la oscuridad y nacemos a la luz desde el primer instante que subimos al escenario de la vida para interpretar ese papel que el destino nos ha preparado en este tragicómico mundo, y regresar, quizás para siempre, a la oscuridad total cuando termine la función.
Conocíamos la existencia de la materia gris, esa que ocupa el interior de nuestras cabezas permitiéndonos elaborar pensamientos, sentir y controlar las funciones básicas de nuestro cuerpo. Pero existe otra materia todavía más gris, tirando al negro: la materia oscura, que forma parte del universo y es tan oscura como desconocido su papel interestelar. Materia invisible, pues no refleja ni emite radiaciones, pero que representa alrededor del 20% de la masa total del universo.
Si ponemos a trabajar tu delicada y luminosa materia gris, contenida en la parte superior de tu cuerpo que limita con el cielo, y mi materia oscura que se despliega por el suelo, formaremos un equipo de color gris oscuro, casi negro, con intención de conseguir resultados sorprendentes en este mundo inconcluso.
Porque la inteligencia creativa de tu cerebro gris, con estructura atómica, y los neutrinos que alberga mi oscura materia se complementan: tu aportas luz y yo la absorbo devolviendo al espacio pensamientos nunca antes expuestos.
Tu luz nos permitirá admirar la belleza que rodea nuestra estrella y la miseria que puebla las zonas menos favorecidas del planeta Tierra.
En múltiples y variadas ocasiones intentaremos sacar a la luz ciertos asuntos, propios o ajenos, para poner de manifiesto situaciones oscuras con insana intención de darlas a conocer y ensombrecer otros tópicos y manidos pensamientos.
Hemos formado el equipo gris oscuro: con tu esclarecedora luz y mi cegadora oscuridad invisible.
Comenzamos a navegar por nuestro espacio analizando el universo en expansión que nos aloja, estamos atentos a su evolución y a la nuestra; desplegamos antenas y telescopios, la observación está en marcha, esperamos resultados.

sábado, 14 de mayo de 2011

Pregúntale al mar.


No preguntes a la Luna
Deja que acaricie tu cuerpo
Con su envolvente luz
Mientras sueñas en la arena.

Escucha las saladas palabras
Que Poseidón te envía
En el rumor espumoso de olas
Que llegan suave a tu orilla.

Son mensajes de amor arrojados al mar
Desde osados barcos piratas
Que surcan tus sueños despiertos
En cálidas noches de luna llena.

Cuentan historias de marinos
Inquietos en la oscura zozobra
De peligrosos mares internos
Donde naufraga su memoria.

No preguntes a la Luna
Escucha las dulces y osadas palabras
Arrojadas a tu onírico mar de dudas
Por marinos que naufragan en ruina.

jueves, 12 de mayo de 2011

Las fantasías de Carlos camino del juego.


Abandonamos la caverna materna, donde hemos ido preparando el desembarco en la realidad de la vida externa, y dejamos atrás las sensaciones captadas a través de la piel de nuestras madres e interpretadas según nuestra fantasía.
Nacemos, ahora, a la luz exterior y todo lo que nos rodea también es fantástico: los objetos, los rostros y voces de las personas, las caricias, besos y abrazos que recibimos, el tacto de las materias y el sabor de la leche materna.
Seguimos creciendo e interpretando el misterioso mundo cercano según nuestro propio juicio. Escuchamos nanas, canciones, cuentos e historias fantásticas; contemplamos películas animadas que nos atrapan potenciando nuestra creatividad.
Recibimos explicaciones a nuestras preguntas, cargadas de imaginación: el ratoncito Pérez, el hombre del saco, las hadas madrinas y los ángeles de la guarda, los reyes magos, dios, bob esponja, santos, demonios y demás personajes literarios infantiles.
Llega un momento, una edad, el inicio de la etapa escolar, cuando comienzan a derribar el mágico mundo, contándonos otras versiones diferentes de aquello que atrapan y transmiten los sentidos a nuestro flexible y sorprendido cerebro.
Nos dicen que el árbol, que acabamos de colorear en rosa, no está en la naturaleza, que es imposible que un barco navegue en un mar de nubes, que los simpáticos fantasmas que vemos por la noche en nuestra habitación tampoco existen, que el caballo azul no puede casarse con la barbie pelirroja y que los reyes magos son los padres, entre otras mentiras y falsedades.
Todos esos mitos y fábulas personales y sociales, que hemos creído a ciencia cierta hasta hoy, son desmontados, destruidos para siempre dejándonos a la intemperie de otra realidad que nos cuesta aceptar, pues ayer vivíamos en otro mundo para nosotros más real, creíble y atractivo que el de los adultos.
Tan sólo nos queda el recurso de conservar la fantasía y seguir viviendo en nuestra nube de ilusión, mientras nos comportamos como seres aparentemente racionales.
Admitimos cualquier explicación, científica razonada y también fabulosamente soñada o inventada, a las dudas que siguen llamando a la puerta de nuestra curiosidad.
Si todavía desconocemos el origen del Universo, sus límites y su destino ¿quién puede estar seguro de algo?
¿Por qué no continuar fantaseando como el pequeño Carlos camino del juego?

miércoles, 11 de mayo de 2011

Sinestésico poema de G.S.


Escucho los multicolores,
Que visten tu delicada silueta,
Mientras observo los acordes
Naciendo de tus labios de fresa.

Saboreo la mano fría,
Que estrecha dulce la mía,
Y palpo la luz brillante
Irradiando de tus ojos de Marte.

Huelo el cariño amargo,
Que escondes en tu calma,
Cuando mezclo mis sentidos
Perdidos en tu mágica aura.

No ingerí ninguna sustancia:
Ni hongos de bosque encantado
Ni LSD enamorado,
Sólo bebo burdeos que escancias.

No creas que soy un triste
Y un melancólico poeta,
Ni tan siquiera soy
Un sinestésico asceta.

Tan sólo pierdo el sentido
Cuando coincides conmigo,
Quedo hechizado y prendado
Para siempre contigo.

lunes, 9 de mayo de 2011

Las posibilidades de la Física Cuántica.


La física cuántica a puesto al descubierto ciertos fenómenos producidos en el ámbito de las partículas subatómicas (protones, neutrones, electrones, etc) que confirman la existencia de múltiples posibilidades, y por tanto de realidades, de la materia.
Los experimentos con la molécula de fullerano demostraron que los átomos que la componen pueden pasar simultáneamente por dos agujeros separados. Es decir están al mismo tiempo en dos lugares distintos (bilocación).
En otros casos si un observador controlaba el experimento las partículas subatómicas cambiaban de comportamiento y atravesaban un solo agujero.
Nuestro cerebro realiza las mismas conexiones neuronales y registra los mismos procesos si observamos, por ejemplo, un árbol que si lo imaginamos con los ojos cerrados.
Dónde está pues la verdadera realidad. Cuál es la diferencia entre ficción y realidad.
Tendríamos que hablar de posibilidades de la realidad: de mostrase ante nuestros sentidos más básicos o de manifestarse en otras formas más sutiles pero igual de reales.
El átomo con su núcleo de protones y neutrones, y los electrones que giran a su alrededor, es un fiel reflejo a pequeña escala del universo, de los universos formados por cuerpos esféricos orbitando en el espacio/tiempo.
Las partículas subatómicas prácticamente carecen de materia, como nuestros sueños, y por tanto se desplazan libremente en el espacio e incluso son capaces de llevar, como nosotros, vidas paralelas en hemisferios diferentes.
Fenómenos que fueron anticipados por la filosofía budista hace más de 25oo años: la naturaleza vacía de los fenómenos (vacuidad).
Somos lo que pensamos, lo que imaginamos, lo que soñamos y lo que aparentemente vivimos. No hay límites para la física cuántica y por tanto no debe haberlos para nosotros, aprovechemos pues nuestras infinitas posibilidades.

domingo, 8 de mayo de 2011

La fantasía.


La fantasía nos permite contemplar la realidad con otros colores y adentrarnos en el bosque de nuestros sentidos.
Imaginamos un mundo tan real y diferente del que intentamos abstraernos, para dar rienda suelta a las emociones que cabalgan en el interior de nuestros sueños.
Fantaseamos, imaginamos, soñamos y vivimos seducidos en la realidad distorsionada de nuestras escurridizas e inquietas mentes.

viernes, 6 de mayo de 2011

Nuestro Big Bang.


Igual que empezamos a contar la historia del universo desde esa gran explosión: El Big Bang, contamos nuestra historia personal desde el momento que nuestra madre explota y comenzamos a crecer y expandirnos por nuestro mundo cercano.
Pero antes del Big Bang existía algo que se estaba cocinando en el espacio. Como nuestro cuerpo que tras la unión de dos células comienza a ir tomando forma para desembocar en lo que ahora somos.
Nuestra prehistoria personal está condicionada por: los genes aportados de nuestra madre y padre; la evolución en el vientre materno y las condiciones climáticas tras el nacimiento.
Somos totalmente dependientes hasta una edad y comenzamos a asumir nuestra independencia a partir de otra edad que tal vez coincida con la mayoría de edad. En ese instante de nuestra historia suponemos que vamos tomando el control de nuestros cuerpos y de nuestros destinos.
Elegimos calles y avenidas por las que transitar, cruzamos esquinas y parques, preguntamos a los viandantes por la dirección del objetivo final al que pretendemos llegar. A veces, casi siempre de las veces, nos desorientamos y acabamos en cualquier barrio periférico alejados de nuestro destino previsto.
Escogemos también, o nos escogen, a las personas que nos acompañan en nuestro peregrinar en esta carrera contrarreloj que es la vida. Personas que influyen notablemente en nuestro comportamiento y nos impelen a desarrollar nuestras capacidades más nobles y nuestros demonios menos humanos.
En ocasiones, como las estrellas, quedamos atrapados con otra persona en la misma órbita y giramos uno alrededor de la otra, cada vez más rápido, acortando la distancia que nos separa. Disfrutamos de esta mágica atracción de cuerpos, mentes y sentimientos, pero, inevitable y fatalmente, acabaremos impactando uno contra otra y nuestra fusión, que nos destruye, se transforma en energía lumínica captada por potentes telescopios de satélites que orbitan a nuestro alrededor explorando nuestro comportamiento.
Venimos en origen de una gran explosión y avanzamos dispuestos a regresar al espacio y al tiempo iniciales por el mismo conducto.

martes, 3 de mayo de 2011

Navegación recurrente.


Aprendimos a navegar en el desierto de nuestra soledad, ese mar ondulado de dunas y olas de arena que avanzan lentamente, movidas por cálidos vientos, en busca de un destino que nunca llega.
Ahora nos adentramos, entre tinieblas, en el mar de nuestras dudas siguiendo el rumbo de las preguntas que la vida nos presenta a cada momento, con la certeza de no encontrar nunca las respuestas adecuadas que despejen para siempre nuestra incertidumbre.
Las únicas verdades que reconocemos son aquellas mentiras que, de tanto ser repetidamente pronunciadas, han tomado carta de naturaleza y nos ayudan a continuar desorientados.
En algunos momentos la bruma desaparece, se esfuma, y contemplamos el sol iluminando el fantástico presente que nos envuelve y a la diosa Atenea en la akrostolia de nuestra embarcación.
Aprovechamos para fijar la vista en el horizonte inalcanzable al que nos dirigimos, sabiendo que nunca llegaremos pues asumimos nuestro inevitable naufragio antes de tocar puerto.
Hemos aprendido a navegar en compañía de la manada de escualos hambrientos que huelen la sangre que circula alterada por nuestras venas, mientras giran alrededor de nuestro oasis flotante, esperando cualquier desliz que alimente sus vientres.
Tan sólo las sirenas, con sus cantos, las yubartas enamoradas y las gaviotas fantasmas que nos sobrevuelan, amenizan nuestra singladura y mantienen la débil esperanza de descubrir una isla virgen en este océano desconcertante.
Aún así somos felices, pues hemos descubierto que la felicidad llega en el preciso momento que dejas de buscarla.
Hace tiempo que dejamos de buscar, tan sólo nos dedicamos a encontrar los restos de naufragios que las olas acercan a nuestra borda y narran las vidas de otros navegantes que llegaron, por fin, a su destino.

lunes, 2 de mayo de 2011

La casa por el tejado.


Vamos a empezar a construir nuestra casa por el tejado, ¿te parece?
El tejado es fundamental para cerrar por arriba la construcción, aportarnos intimidad, protegernos de la luz del sol y de las inclemencias del tiempo: lluvia, granizo, nieve, frío, calor, viento.
Lo primero son las tejas, a ser posibles tejas viejas que hayan soportado la intemperie durante muchos años, décadas. Intercalemos tejas nuevas, jóvenes, que repongan las rotas y aporten un toque juvenil y moderno a nuestro tejado.
Por supuesto buscamos la inclinación perfecta para evacuar el agua de lluvia con eficacia evitando que filtre al interior, si es leve, y que eleve la construcción, si es pronunciada. Encontramos el equilibrio perfecto en torno al 15%.
Observamos la disposición de las filas de tejas: alternando una fila convexa con otra cóncava por la que circule el agua.
Renunciamos a instalar un canalón al final del tejado, que reciba el agua de lluvia y la desagüe canalizada a la calle, pues preferimos que vierta directamente al aire aunque moje a los viandantes.

Aquí termina la descripción de la construcción. Si piensas que mi inconsciente intenta decir algo más, puedes utilizar esa rama de la literatura fantástica, como decía Borges, llamada Psicoanálisis, para sacar tus propias conclusiones, haciéndomelas llegar para modificar o descartar el proyecto. Gracias.

domingo, 1 de mayo de 2011

Día de la madre.


Hay un día al año para la madre, que tal vez sea hoy: uno de mayo, o todos los días del año.
Pero, cómo celebrarlo si tu madre y la mía ya no habitan en este mundo. Marcharon porque el tiempo terminó para ellas: la mía a su tiempo y la tuya antes de tiempo. Cierto que habitan en nuestras mentes, en nuestra memoria, en nuestro presente y en nuestros corazones. Están a la vista en fotografías que cuentan sus vidas y las nuestras, en objetos materiales que tocaron, en escritos con sus letras de puño y sus nombres de santas, en vídeos donde cantan, bailan y lloran. Porque una madre es eso: alegría y llanto. Alegría cuando están alegres y también cuando disimulan la tristeza, y llanto cuando no hay más remedio que dejar correr las lágrimas para que limpien la realidad que hiere.
Celebremos hoy con ellas, que no han venido porque nunca se fueron, el día de la madre, de nuestras madres, de la tuya y de la mía, y celebremos también que tú eres madre y por tanto es tu día, felicidades.