jueves, 12 de octubre de 2017

Calle amargura.


Quise escribirte una carta con renglones torcidos y letras vacías para que tú, al leerla, enderezaras las líneas y llenaras de certezas mis dudas. Quise, sabiéndolo todo, no decirte nada, callar como callan las olas cuando el mar está en calma. Quise saber por qué lo hiciste sabiendo de antemano el daño que me infligías. Quise, ¡cuánto te quise!, antes de escribirte mi última carta. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Quise, ¡cuánto te quise!, antes de escribirte mi última carta.
Duele hablar de un pasado